Una quimera: Hugo Chávez y su primera Cumbre Energética Suramericana

Si se pone en perspectiva, Hugo Chávez nunca ha sido proactivo, en realidad, él nunca ha estado a favor de nadie: en 1992 se levantó contra Carlos Andrés Pérez, en el '98 contra la corrupción adeco-copeyana, durante todo su gobierno contra el Imperio, el golpismo, la conspiración y un largo etcétera.

Cuando se le pregunta a favor de quién está Hugo Chávez comenzará su rosario abigarrado que incluy a Bolívar, Simón Rodríguez, Ezequiel Zamora, Fidel Castro, Ernesto Ché Guevara, Jesús de Nazaret, Carlos Marx, Noam Chomsky, Martha Harnecker, Heinz Dietrich, Norberto Ceresole y la lista continuaría...

La cosa es que esta vez, Hugo Chávez reacciona frente al gobierno norteamericano convocando esta cumbre de energía para tratar de hacer "control de daños" frente al potencial peligro que para las arcas nacionales generaría un compromiso en la región con el etanol...

En nuestra opinión, esta cumbre, aparte de un despilfarro innecesario que podría invertirse en el bienestar del pueblo que Hugo Chávez tanto dice querer, es una muestra de dos cosas: por un lado, el fracaso de su gira anti-Bush, ya que ha tenido que reforzarla con este invento de nuevo cuño; por el otro, la vocación imperialista y esclavizadora de Hugo Chávez, quien pretende en este evento probar lealtades, bajo la amenaza de quedar fuera -si el sometimiento no es total- del repartimiento irracional de la piñata revolucionario, que incluye combustible a borbotones, con facturas a precios de Pepeganga, pagaderas más allás de dos mi siempre...

En nuestra opinión, sea cual fuere el resultado de la cumbre, terminará por demostrar que, en términos estratégicos, realmente Hugo Chávez debe estar entre las cinco o seis personas menos capacitadas para gobernar Venezuela...