Un disfraz como forma de vida: Francisco Arias Cárdenas en uniforme este 4-F

Era monaguillo, trató de ser cura. Luego fue militar. Le gusta el disfraz.

Es Francisco Arias Cárdenas. Pancho, como le dice el presidente cuando están de buenas al actual embajador de Venezuela en la ONU.

En 1992 tomó el mando del estado Zulia en la azonada golpista que había planificado junto con Hugo Chávez...

Luego, siguiendo el ejemplo de los revolucionarios venezolanos, a quienes con un cargo público y su respectivo sueldo se les asimila al sistema, acepta el ofrecimiento de Rafael Caldera de dirigir el Programa de Alimentación Materno Infantil... disfrazado de arrepentido...

Luego, con Chávez ya en planes políticos, llega a la gobernación del Zulia. Durante los días de la gloria primera, Pancho se disfraza de chavista. pero luego, en un macabro enrroque, se disfraza de opositor y va contra su compadre en las presidenciales del 2000...

Derrotado, pero activo miembro de la oposición, se acerca el año 2002 y, sobre todo, sus finales y principios del 2003, época del paro petrolero. Sus bolsillos vacíos, la dignidad era mercancía pasada de moda, así que, primer se disfraza de enfermo: nunca expone su posición respecto del paro, como presidente del partido Unión, pues se encuentra con una neumonía y ronquera permanentes...

Este tiempo le sirvió para desempolvar el disfraz chavista y organizar una humillación pública junto con Yoel Acosta Chirinos, porque más vale que digan aquí comió que aquí murió dignamente. Y el comandante Chávez los hizo sufrir, pero Pancho le sacó lsutre al disfraz y se hizo tatuajes para hacerle ver que esta vez iba en serio...

Hoy, en el desfile conmemorativo del golpe de Estado del 4 de febrero de 1992, Pancho Arias, maestro del disfraz, atacó de nuevo: se puso su traje de campaña y salió a celebrar la buan vida que lleva en el corazón del imperio y, mientras se escuchaba el himno nacional, no es inverosímil pensar que por su cabeza sonaba más bien Sinatra, más bien New York, New York...

¡Así, así, así es que se conspira!