Un verdadero triunfo de la revolución: el despeje del bulevar de Sabana Grande

No vamos a cer en la mezquindad de recordar que esto debió hacerse mucho tiempo y, de hecho, debió haberse evitado que se recrudeciera el problema...

Tampoco caeremos en el sentimentalismo de imaginarnos cuán defraudados se sentirán los buhoneros quienes, mayoritariamente, servían como pequeñas estaciones de difusión del mensaje chavista antes de las elecciones del 3-D, con pancartas, volantes y megáfonos...

La realidad es que caminar por Sabana Grande despejada es un placer y un disfrute tan profundo que no nos detendremos en esos detalles...

Aparte, se trata de una nota de felicitación a la revolución y, en específico, a quien, al menos a través de los medios, ha dado la cara al respecto, el alcalde Freddy Bernal...

Sería interesante, al suponer como lo hacemos que esta decisión de mantener a los trabajadores informales fuera del bulevar es definitiva, extraer de ella varias moralejas:

1)La ley es la ley y debe cumplirla quien sea, desde el presidente al buhonero más humilde y debe existir mecanismo para garantizar eso

2)Hay problemas que, para solucionarlos, más que cualquier otra cosa, requieren voluntad y coraje políticos, así que, es el momento de continuar tachando de la lista inmensa de pendientes

3)Hay que encontrar soluciones que permitan a los buhoneros ejercer su actividad comercial o alguna otra productiva, de una manera digna y sin obstaculizar el paso de los peatones...

El rescate de las aceras para los peatones será un paso adelante en términos de ciudadanía, limpieza de la ciudad y, muy probablemente, seguridad personal...

Así que, sin más,

¡Salud por el bulevar rescatado!