miércoles, junio 21, 2006

Una reflexión sobre una especie en peligro de extinción: los ritos

Nos casamos por la iglesia, celebramos nuestros cumpleaños, asistimos a oficios religiosos, nos desbocamos en navidad y en año nuevo y a veces perdemos la perspectiva de la esencia, del significado de esa repetición incesante de eventos de manera periódica.

Sin embargo, la esencia de esos ritos está allí, por lo cual les dejo un fragmento de "El principito" de Antoine de Saint-Exupéry, que me hace recordar aquella famosa frase de la película "Filadelfia" en la cual Joe Miller, el personaje de Denzel Washington le pide a Andy Beckett (Tom Hanks) que le explique las cosas como si fuera un niño de 6 años.



"El principito volvió al día siguiente.

-Hubiera sido mejor -dijo el zorro- que vinieras a la misma hora. Si vienes, por ejempló, a las cuatro de la tarde; desde las tres yo empezaría a ser dichoso. Cuanto más avance la hora, más feliz me sentiré. A las cuatro me sentiré agitado e inquieto, descubriré así lo que vale la felicidad. Pero si tú vienes a cualquier hora, nunca sabré cuándo preparar mi corazón... Los ritos son necesarios.

-¿Qué es un rito? -inquirió el principito.

-Es también algo demasiado olvidado -dijo el zorro-. Es lo que hace que un día no se parezca a otro día y que una hora sea diferente a otra. Entre los cazadores, por ejemplo, hay un rito. Los jueves bailan con las muchachas del pueblo. Los jueves entonces son días maravillosos en los que puedo ir de paseo hasta la viña. Si los cazadores no bailaran en día fijo, todos los días se parecerían y yo no tendría vacaciones."