viernes, julio 28, 2006

Un comentario de Milagros Socorro sobre la lucha en contra de la piratería en Venezuela

"DESDE LUEGO, SI UNA CONDUCTA ESTÁ REÑIDA CON LA NORMA, NO DEBERÍA HABER CONFLICTO: ES ILEGAL Y PUNTO. Debe desincrustarse de la sociedad. Pero, con la mano en el corazón, ¿será posible acabar con la piratería en Venezuela? Y fíjate en que no estoy pensando en que lo haga el mismo Gobierno que creó las listas Tascón y Maisanta, convertidas inmediatamente en hit de ventas de los buhoneros, sin que se sepa de ninguno que haya sido detenido o multado por esto. No, no. Estoy pensando en una dinámica social que por un lado nos hace ávidos de información y por el otro estrangula día tras día nuestra capacidad adquisitiva. Lo terrible es que no sólo los grandes centros mundiales son afectados por la mañita de comprar productos piratas (que es de sospechar que el mercado latinoamericano no es que vaya a hacerlos más ricos o más pobres) sino que también nuestros cineastas y músicos salen perjudicados con esta industria ilegal. Con frecuencia los escuchamos en la radio instando a los consumidores a adquirir las versiones legales de sus producciones, porque el hecho es que no han terminado de salir de las casas editoras cuando ya están siendo venteadas en las autopistas. Qué se hace, en todo lo que hacemos hay un país detrás."

Extracto de la columna Con acento de Milagros Socorro, del jueves 27 de julio de 2006, publicada en el diario El nacional.